Perdonar...¿Yo?

Muchos dicen "Yo perdono pero no olvido". Otros dicen: "Que te perdone Dios, porque yo no puedo". 

Aunque, si creo que todos estamos de acuerdo, con la famosa frase: "El perdón es un proceso". Teniendo en cuenta que a veces, es necesario perdonar a la misma persona por los mismos hechos muchas veces.  O también puede ocurrir que después que perdones a esa persona, vuelva a hacerte el mismo daño o peor. El perdonar no es humanente fácil, al contrario, es muy  difícil pero necesario y posible a través de nuestro Señor.

NECESITAMOS, dejar ir libres a esas personas que nos ofendieron, maltrataron, o traicionaron y que tenemos presos en nuestros corazones. Seria, agotador y dañino para nosotros mismos sino los dejamos ser libres. Porque estaremos constantemente alimentándolos con rencor, resentimiento,  odio, y todo eso será luego una enredadera de raíces de amargura, que terminarán afectandonos gravemente.

Aparte, de que eso abrirá puertas en tu vida espiritual, de las cuales el enemigo no esperará para tomar ventaja. No es que sea justo o este bien lo que te hicieron. Se trata de perdonar. 

¡Claro!, no olvidarás porque nuestra mente es una fantástica computadora y ahí todo esta archivado. El asunto es no recordar con odio, rencor o coraje.

Por otro lado, si donde quiera que vas hablas del mismo asunto vez tras vez y lloras y lo hablas como si acabará de ocurrir, te hará más daño.  Hay momentos de callar, y dejar ir. Es como tener una herida que cada vez que hace cascarita la arrancas,  por supuesto,  jamás sanará. 

Pero cuando perdonas y has sido libre por completo de esa angustia,  ese recuerdo ya no duele, ni te hace llorar o enojar. Porque ya no es una herida sino que viene a ser una vieja y seca cicatriz. Es entonces, cuando puedes narrar a otro tus pasadas experiencias, libremente y sin tapujos. Y lo que fue tu dolor y tristeza viene a ser un testimonio de consuelo y de esperanza a otros. Para llegar a esto deberás perdonar tal vez muchas veces el mismo asunto. Si la persona no vive ya,  o esta lejos de tu alcance, ora a Dios y declaralo en oracion. Por ejemplo,  Señor yo he decidido perdonar a fulano de tal, por esto, esto y esto.

Es necesario,  orar a Dios por fortaleza, el Espiritu Santo te guiara en ese proceso.  Y muy importante,  guarda tu corazón para que no se dañe. Proverbios 4:23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón;
Porque de él mana la vida.

El perdonar no es ponerse de alfombra o trapeador. El perdón es reconocer que fuiste herido u ofendido y aunque fue doloroso o triste, no tomarás ventaja usando eso como excusa para pagar con la misma moneda y tampoco tomarás venganza. Dice Dios en su Palabra: "Mía es la venganza y la retribución;
A su tiempo su pie resbalará, Porque el día de su aflicción está cercano, Y lo que les está preparado se apresura." Dt. 32:35

Hay personas que piden perdón y reconocen sinceramente su error. Mientras hay otros que viven en un constante remordimiento dicen si, si lo hice mal, lo reconocen pero vuelven a fallar en lo mismo. Su conducta es repetitivamente ofensiva y están lejos del arrepentimiento genuino. ¡Cuidado con esos! Perdónalos, por tu propio bien y salvación pídele ayuda a Dios, pero mantente al margen. Debes cuidarte para evitar que lo vuelvan a hacer.

También,  están los que te ofendieron y no lo saben. Debes de hablarles de ser necesario y notificarles, si ellos no saben no puedes culparlos. Sino es necesario pues perdonalos en oración y continúa sin prejuicios, o rencores, después de todos ellos están ajenos.

La vida da muchas vueltas, dicen por ahí. Y no te sorprendas cuando tus enemigos estén en una posición vulnerable y tu tengas el sartén por el mango. Piensa...Mmmm!! ¿Qué haría Jesús? Obviamente, perdonar y nosotros seguimos su ejemplo. No les pagarás con la misma moneda. Haz brillar el amor de Cristo que esta en ti. Recuerda antes de todo eres embajador del reino de Dios en la tierra. . Representa al Señor dignamente.

Hace mucho aprendí, que nosotros los cristianos no somos enemigos de nadie pero no podremos evitar tener enemigos,  como le ocurrió al Señor Jesucristo. Algunas personas quieren estar bien con todo el mundo.
Lamentablemente,  en mi opinión eso es falta de convicción, de seguridad en su propia opinión y traición a sus propios principios, ideales o creencias. No podemos estar con Dios y con el diablo a la vez. No podemos complacer a todos a la vez. Siempre habrá alguien que se queje, y en algún momento tendrás que escoger un bando y si te quedas en el medio estarás en problemas.

A quien tenemos que agradar y con quien tenemos que estar de acuerdo es con Cristo. Mis ideales, principios, costumbres,  creencias y  convicciones deben estar de acuerdo a la Santa Palabra. Y apoyo, admiro, aplaudo,  consiento, motivo a todo aquel que este viviendo de acuerdo a la Palabra sino, no.

A Dios daremos cuentas de todo lo que hacemos y decimos.  También daremos cuenta de todo lo que debíamos hacer y no hicimos. Santiago 4:17 y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.

Para concluir, perdonar no es fácil pero tampoco es imposible. El perdonar es una desicion, elige responsablemente. Por tu salvación,  por tu prójimo,  por ti.  Perdona,  a tu prójimo 70 veces 7 (hebraísmo para señalar, que perdones las veces que sean necesarias) .

Lo necesitas, te aliviara, te desatará,  y habrá sanidad y restauración para ti, en la sangre de Jesús.  Pero solo tu debes decidir. La solución está en tus manos. ¡¡Se libre!!