"Be all you can be"

Quien dijo que no podías te mintió,  el que dijo que no lo lograrás habló demás, el que creyó que no serias capaz estaba engañado. Todo es posible si puedes creer. Ser diácono, ujier, ministro, misionero y mucho más lo puedes lograr. Podrás hacer todo lo que te propongas para trabajar en la obra del Señor, con el propósito de honrar Su nombre; porque todo lo podemos en Cristo que nos fortalece, Fil.4:13.

En el 1980, el empleado civil Earl Carter, fue el responsable del  slogan que dice "Be all you can be" para el ejercito de los Estados Unidos. Ese slogan se mantuvo por 20 años y  a mi me fascina; me gusta porque es cierto. Sin quitarle efecto al kairos (momento perfecto) de Dios y amparandonos bajo su voluntad; Tu puedes ser todo lo que quieras ser. Podrás hacer todo lo que te propongas para trabajar en la obra del Señor, siempre que sea con el propósito de honrar Su nombre y cumplir sus decretos.

Solamente tu decides a donde vas, que vas a lograr y cuanto tiempo te costará llegar ahi. La disciplina, el compromiso y la actitud determinan en gran parte tus exitos. Si pones esto de tu parte con la ayuda de Dios triunfarás.

Según definición.de, el compromiso se deriva del término latino 
compromissum y se utiliza para describir a una obligación que se ha contraído o a una palabra ya dada. Ademas, para estar comprometido con algo o alguien se tiene que tener conocimiento, sino no sería un compromiso. Cuando nos arrepentimos a los pies de Jesucristo no tan solo es declararlo como Salvador en nuestras vidas sino hacer un compromiso de cambio de nuestra vieja manera de vivir.

Es como los medicamentos te pueden ayudar en tu enfermedad pero si no los tomas según la orden médica y no haces cambios en tu comportamiento rutinario no veras cambios.
En el Señor, Él es la medicina que necesitas para todo tu ser pero sino haces compromiso de poner de tu parte para tu bienestar, para tu salud y salvación sería remordimiento y no genuino arrepentimiento. Porque de no haber compromiso de tu parte volverás a tu viejo patrón y no abra cambios importantes.

Por otro lado, después de asumir el compromiso de renunciar a nuestros antiguos rudimentos, debemos entrar en una disciplina espiritual para alcanzar lo deseado.  Debemos anhelar día a día ser llenos del Espíritu de Dios mediante el estudio de la Palabra y la oración.  Cuando oras hablas con Dios y cuando estudias las Escrituras,  Dios te habla a ti. Al comienzo,  será una disciplina pero llegará el momento en que será una necesidad y estilo de vida para ti. Será parte indispensable de tu diario vivir.

Y no te dejes llevar por las emociones.  Recuerda, hablamos de cosas espirituales, esto es por fe. Abrá momentos en los que sientas que el Espíritu de Dios sacude tu espíritu y su fuego te consume,  que la Santa Palabra se hace rema en tu vida y que Dios esta tocando las fibras de tu corazón. Como también,  Abrá momentos en los que no se te mueve ni un pelo, pero aún así Dios esta contigo nunca estarás sólo. Tenemos que acercarnos a Dios creyendo por fe que el nos escucha.

Pienso que la disciplina es..."Hacer persistentemente lo que cuesta esfuerzo y sacrificio, para lograr lo que quieres obtener y pocos pueden alcanzar". Hacemos muchos ejercicios y dietas por la salud por nuestra apariencia etc... Para esto es necesaria la disciplina. No tan solo queremos graduarnos. Sino hacerlo con excelentes promedios y con honores incluido.  Para esto es necesaria la disciplina. Y en los asuntos del Evangelio la disciplina es muy importante,  debemos cuidarnos de como nos comportamos, como comemos, como nos vestimos, como socializamos, en fin todo. Porque una vez has aceptado el compromiso de Evangelio de nuestro Señor,  Jesucristo es el Señor de tu vida y es el quien gobierna tu ser. Como decía el Apóstol Pablo, ya no me ciño yo, me ciñe Cristo. Ahora representamos un reino y siempre debe ser nuestro mayor propósito engrandecer el nombre de nuestro Salvador y Rey Jesucristo Señor nuestro.

Aparte del compromiso y la disciplina, la buena actitud para mi es vital. Dice Definición.de,  que la actitud es el estado de animo que se  expresa de cierta manera. Entonces, nadie quiere estar cerca de alguien con malas actitudes. Puedes tener un gran compromiso y llevar una gran disciplina de vida pero si tu actitud no es la de agradar a Dios y amarlo por sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo, estas en la actitud errónea y negativa. De nada sirve ser aptos si nuestra actitud no es la correcta.

Nuestra actitud siempre debe ser la de exaltar a Dios con nuestras acciones y palabras. Que el mundo vea reflejado en nosotros el amor de Cristo. Que la gracia que nos arropa sea nuestra carta de representación ante los demás. Que no importa lo difícil de la prueba y lo que nos aqueje el dolor, siempre sea nuestra actitud una de confianza en el Señor y regocijo en Su presencia. Que nuestra buena actitud muestre rostro de victoria y fe en lo que hemos creído. Que nuestra buena  actitud sea disfrutada por otros y sea de motivo para ellos saber que causa tan buena actitud, siendo esa la puerta de entrada para presentar a nuestro Señor como motivo de nuestra dicha.

Compromiso, disciplina y buena actitud, tres componentes muy importantes para el desarrollo de nuestro vivir en Cristo.

Jesucristo nuestro Salvador ya hizo su parte, ya el murió en la cruz del Calvario para el perdón de toda humanidad.  Queda de cada uno de nosotros atesorar ese sacrificio perfecto y santo de amor. Jamás podremos pagar esa hermosa ofrenda,  pero si podemos decidir llevar una vida que agrade a Dios. Por nuestro bien, por la vida eterna que Cristo nos ofrece.

Asi que,  ¡adelante!  Comprometete con Dios y contigo mismo. Entra en una disciplina santa y con buena actitud trabajemos para el Señor. Jesucristo vino para darnos vida y darnosla en abundancia. Puede ser todo lo que te propongas en las manos del Señor, de acuerdo a Su Palabra y para gloria de Su nombre,  ¡amén! "Be all you can be"